jueves, 26 de julio de 2012

Después de una caída, hay que levantarse


Hoy era el día en que comenzaba la magia de los Juegos Olímpicos y corría de nuestras cuenta poner la calidad, pero no ha podido ser. En fútbol masculino, una de nuestras especialidades, hemos tropezado contra Japón, un conjunto que se puede configurar como el equipo revelación de las olimpiadas. Pero una vez que hemos caído, no vale tirar la toalla, lo que debemos hacer es aprender de los fallos y preparar mejor el próximo partido, que será crucial. 

Nuestro primer partido se disputó a mediodía contra la selección nipona. Antes de empezar todo iba bien, pero con el saque inicial, los japoneses sacaron ese Samurái que llevan de dentro y supieron plantar cara a la selección campeona de Europa.


Los japoneses supieron jugar sus cartas y cortar de raízn el juego español,un juego lento, de maduración, en el que intentamos abrir huecos, presionando muy arriba y ahogando a nuestro cerebro, Isco estuvo desaparecido en el partido.

Después de tímidos ataques a la portería nipona, Japón dio la sorpresa en el minuto  33. Ogihara sacó un córner y Otsu remató a placer metiendo el único gol del partido. El gol fue un error de la zaga española que no marcó bien al japonés.

Tras  el primer gol, España se puso muy nerviosa. Y se notó, las juagadas ya no eran tan elaboradas y hubo pérdidas de balones muy tontas. Pero el climax del partido llegó en el minuto 41, cuando, después de una buena jugada del conjunto nipon, Iñigo Martínez vio la tarjeta roja y se tuvo que marchar a los vestuarios por una falta al delantero que se iba solo.

En el descanso no hubo cambios, salieron los diez que terminaron el primer tiempo. Javi Martínez se puso de central y España intentaba hacer lo que podía, pero los ataques nipones no dejaron de sucederse. Japón tuvo dos muy claras, dos mano a mano contra de Gea, que paró bien. 

Con la salida de Ander Herrera, el equipo español respiró un poco y empezamos a  atacar. A falta de 15 minutos una buena combinación entre Mata y Jordi Alba estuvo a punto de poner el empate en el marcador, pero una buena intervención del portero nipón lo impidió, echando el balón a córner. 

El equipo japonés fue más listo y supo jugar con lo que tenía, en cambio, España se atascó debido a la resistencia que se encontró. Japón fue superior tácticamente y si no llega a ser por de Gea, España hubiese perdido 4-0.

            Lo tenemos más difícil para pasar, pero… nos pasó lo mismo en el mundial y lo terminamos ganando. Ahora no podemos criticar a los nuestros, sino apoyarles y darles ánimo para afrontar el siguiente partido contra Honduras, un hueso duro de roer.




1 comentario:

  1. Buena información, hay que levantarse, claro que si!! Como hizo la absoluta en el mundial y la Eurocopa!! Gracias por toda la información que pones en este magnifico blog.
    Fer

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